El zahorí señaló dos puntos posibles para la ubicación del pozo de los cuales uno coincide con el estudio realizado desde Barcelona por parte de la empresa Waterfinders. La semana pasada se realizó un sondeo eléctrico vertical para conocer la resistividad del terreno. Después de una semana de espera, hay buenas noticias. Los resultados ya están listos y son muy positivos. Hoy vamos a Arusha a comprar la bomba y el tanque y, si no hay ningún imprevisto, el viernes se llevará a cabo la perforación. El ritmo Tanzano nos mantiene en tensión hasta el último momento. Aquí a nadie le ha pasado que le cierren las puertas del autobús en la cara, el transporte publico no tiene horario, te esperan a que llegues con la calma. Siempre se hoy el típico “pole pole”, lo que vendría a ser en España un: poco a poco, no hay prisa.
Durante la semana de espera hemos terminado las pizarras y la pintura de las clases del nuevo colegio. Shine ya tiene listas las dos primeras aulas. El jueves, cuando volvimos de Shine, llamamos al veterinario pues una de las vacas llevaba dos días que apenas se movía. Falleció de una infección de estómago y el doctor aprovechó para darnos una clase práctica de cada una de las parte de la vaca. Todos quedamos asombrados al ver la cantidad de comida que sacaba de sus 4 estómagos. La verdad que ha sido una gran pérdida. Estaba preñada y tan solo le quedaban un par de semanas para dar a luz. Además, venden la leche para poder pagar, entre otras cosas, clases de costura para Reema, una joven de 17 años que vive en Fruitful Orphanage.
Reema, Verónica , Rebeca y Bahati llegaron aquí hace un año. Las cuatro hermanas comparten madre y cuando ésta falleció por exceso de drogas, fueron a vivir con su abuela que, ya de edad avanzada y con adicción al alcohol, las trajo a Fruitful. El interés de Reema por la costura se debe a su fascinación por los vestidos que ve cada domingo cuando va a la iglesia. Joyce le propuso aprovechar la máquina de coser que le habían regalado por su boda y hacer ropa por encargo y así aprender un oficio con el que ganarse la vida. Lidia, la vecina costurera, está viniendo de lunes a viernes aprovechando las vacaciones para enseñarle pues Reema va al colegio público de la zona donde recibe educación básica .
Las otras tres hermanas tuvieron más suerte y fueron apadrinadas para ir a colegios donde aprenden inglés y otras muchas cosas. Verónica va a un colegio cercano llamado Haradali mientras Rebeca y Bahati van a Blue Sky. La menor de las hermanas, Bahati, tiene VIH y viene cada noche a tomar la leche que le prepara su hermana y así ayudar a mantener sus defensas. El gobierno Tanzano provee cada mes de medicación para los casos de VIH. Datos de la organización benéfica AVERT, que trabaja por el VIH y el sida, muestran que 33.000 tanzanos mueren al año por complicaciones derivadas del VIH/sida.
Junto con las 4 hermanas vinieron sus primos Denis, Deo y Daudi, que también habían estado viviendo con su tía. Pero no todos los niños que viven aquí son huérfanos. La mayoría tienen algún familiar pero les traen a vivir aquí porque no pueden mantenerlos, bien sea por falta de recursos o porque trabajan todo el día y no pueden ocuparse de ellos. También se dan casos en los que la estancia en el orfanato es por una temporada debido a lo anteriormente mencionado y, tras ese período de dificultad, es una inmensa alegría ver que el niño o niña vuelve a su hogar en buenas condiciones. Tras reflexionar estos días sobre la función de los orfanatos, creo que aunque haya auténticos profesionales nunca suplirán el calor de un hogar y que deberíamos ir a sanar la raíz del problema promoviendo siempre el cuidado de la familia.
